CAPÍTULO 120 : EL MERECIDO DESAYUNO

Ya era hora, tras las duchas y habernos vestido, estábamos en el pasillo esperando al padre Raphael, que nos llevaría como es habitual a la zona del comedor para desayunar, al fin teníamos algo caliente que llevarnos a la boca, no me malinterpretéis, no es que nos estuviéramos muriendo de hambre, sino que con la noche que hemos pasado necesitábamos todos, los del curso, de 7 Grado, estar en ánimos y con fuerzas por que se iniciaban las semanas decisivas con las Evaluaciones de Invierno, ésto es, los exámenes de las diferentes asignaturas, y el padre Raphael ya nos ha fastidiado con una de las suyas, nos ha indicado que sus exámenes van a ser orales y que será entrar uno a uno a su despacho, y la resta fuera en el pasillo, si no aciertas, reglazo en la mano, y el suspenso, así es como éste ha hecho siempre.Nollen a ese respecto se prepara mentalmente, siempre sale de allí bastante caliente de manos, los reglazos que recibe son de campeonato, pero aún hay más, me ha confesado, que el padre Raphael, para saber si te has estudiado las lecciones de su Religión, te hace preguntas trampa, esto es que debes pensar muy bien las respuestas pese a que lo sepas de verdad, usar la lógica y ante todo no ponerte nervioso por los paseos que éste se da alrededor tuyo.Yo estaba ya, como un flan, ya que después de recibir el Gran Castigo, y la última, la pela de patatas con azotes incluidos para mi y Nollen, y no fueron pocos, como cuento yo a mis padres al regresar a casa por Navidad, si es que regreso, lo sucedido, ya que todos esos castigos, míos recibidos como de cualquier otro alumno quedan reflejados en el libro de cualificaciones, además de quien los impartió y por que, mi padre ya lo decía, éste será el mejor colegio para mi hijo Charles, que se lo pasará bien y convivirá con otros chicos de su edad, eso si, de mi edad y algunos tiránicos.Estando en el pasillo, pareció el padre Raphael, -Venga chicos en fila como es habitual, cada uno en su sitio, los que estén en las habitaciones, gritaba, que se incorporen a la fila.......Así como niños modositos de casa bien, como si tuviéramos 5 años, íbamos en fila, Nollen me decía,-Sólo falta ahora que nos ordene cogernos de la mano, yo le dije lo hacemos ?, éstas loco Charles, quieres que el padre Raphael nos muela a palos de nuevo, es broma, le indique yo, el padre Raphael indicó, -El señor Lidberg y el señor Nollen, callénse de una vez ¡¡¡ y eso hicimos.Llegamos al comedor, allí estaban los profesores a los que saludábamos por las mañanas, por que pasábamos delante de ellos, una vez en la mesa, comiendo, Nollen me preguntó,-Que tenemos hoy de materias ?, yo pensé y le dije, -Creo que Francés por un lado, Geografía e Historia por el otro, no me acuerdo en que orden, y al padre Raphael en su clase de Religión, y la maravillosa Informática, bendita Informática.Nollen me indicó, -Pues, que asco ¡ me voy a aburrir, ahora eso si, sabes que los mayores acuden a Francia de vacaciones para practicar el francés aprendido aquí ?-Vaya ¡ le indiqué yo, eso si que está bien a ver si llegamos a ese curso y hacemos algo al respecto, aprobar todas me indicó Nollen y echamos unas risas.El Prefecto pasó a nuestro lado y nos hizo levantar, y nos llevó ante la mesa de los profesores y comunicó nuestra falta, hablar y reír estaba prohibido en el comedor, 10 azotes a cada uno, indicó el padre Raphael, además se quedarán sin desayunar, ahora bajénse el short y coloquense apoyados en esa mesa, la resta siguió comiendo, tenían prohibido ver, para eso estaba el Prefecto, para vigilar que nadie se le ocurriera alzar la vista mientras nos azotaban de nuevo, el padre Raphael nos impartió el castigo además de decirnos,-No tenéis bastante vosotros dos verdad ?, ayer, hoy antes de ayer, .....tendré que buscar algo que os anime a dejar de ser rebeldes, y usted Lidberg si sigue así tardará mucho en perder de vista el uniforme Beige, de eso estábamos hablando con el Director pero ya veo que no será posible levantarle el castigo de eso.Tras recibir los azotes, tuvimos que estar de rodillas en un rincón ambos con todo bajado, y la resta se iba levantando y camino del aula..En esos casos, los castigados salíamos los últimos y el padre Raphael o el Prefecto nos acompañaban a clase eso, era la segunda parte de la humillación, como niños pequeños controlados, y eso es lo que sucedió para empezar las clases del Jueves.