Si, al fin sonaron las campanas que, hacen que los alumnos vayan a hacer las filas, en cambio nosotros tres, Michael Foull, Benjamin Nollen y yo, Charles Lidberg estábamos castigados, de rodillas con todo bajado ante una pared y con el trasero mas que rojo, y el Prefecto dando vueltas a nuestro alrededor.Éste siguió con sus bromas y burlas jocosas por nuestros Penes, si eran grandes, si estaban duros por el castigo y ya no quiero recordar que.Pero, llegó un momento en que nos ordenó subirnos todo, colocarnos bien el uniforme, y salir de allí tan rápido como pudiéramos, y si rechistar, eso si, cumpliendo con la tradición inglesa de darle la mano antes de salir, eso significa que, entre caballeros no hay venganza por lo sucedido y que él, solo cumple con su deber, que si alguna vez llegábamos a ser Prefectos, lo entenderíamos, pero más bien no.Salimos y él salió detrás nuestro, nos indicó que guardásemos silencio hasta llegar al pasillo dónde estaban la resta de compañeros en fila y formados, el padre Raphael le pregunto :
-Bien, algún problema con ellos ?
-No padre, contestó el Prefecto, se les ha castigado en proporción a su falta, unos 40 azotes por cabeza y han estado más de media hora de rodillas ante la pared con las manos tras la cabeza.
-Perfecto, indicó el padre Raphael, vayan a la fila.
El Prefecto no es que se metiera en la fila, simplemente es que no es de nuestro curso sino del último, y es veterano por lo que regresó con los suyos, a comentar la jugada y señalándonos a los tres como las víctimas de su castigo, los otros chicos, estuvieron riendo a carcajada limpia, pero poco podíamos hacer, ya éramos los tres, la conversación de ese curso de Grado 12, chicos de entre 17-18 años de edad.La fila llegó al comedor, allí con la cola fuimos sentándonos en nuestros sitios, y esperando a que llegasen la resta de maestros y llegaron, pero con una sorpresa inesperada, un chico de aspecto árabe, bien trajeado con una ropa de gentleman, estaba al lado del Director, y éste, se levantó, picó con una cucharilla una copa mientras iban sirviendo la comida.
-Caballeros, atiendan por favor, éste chico es nuevo aquí es el chico que anuncié que llegaría, él se llama Mohamed Al- Duri Hizallah, su padre es, un Príncipe árabe, aunque en efectos prácticos no gobierna más que una porción de territorio, es decir que poseen una tribu con tropa armada para defender su territorio y poseen una fortaleza en el desierto, quiero que le tratéis bien, éste es un chico que del Inglés le está costando y por ello, lo está aprendiendo, irá a la última clase de Primaria, pero hará la primera de Secundaria.Yo quedé atontado y codee a Nollen.
-Has oído eso ?, vendrá a nuestra clase
-Ya, Charles, eso no es bueno, seguro que entrará en conflicto con alguien y sino al tiempo
-No, puede ser, tío, es imposible, querrá dormir en una habitación de 400 metros cuadrados, vete a saber en la que dormía, pero cuando vea la de aquí se va a enfadar y mucho.Esa era una sorpresa inesperada, la otra es que lo sentaron en nuestra mesa, nadie habló con él para nada, la otra llegó con la comida, crema de verduras, pasable, pero de segundo, pescado, que manía con el dichoso pescado, podrían hacer algo a gusto de los chicos no ?, yo me quedé mirando al nuevo, lo tenía de frente, no quería comer, o no veía nada de lo que le ponían, y Nollen soltó una de las suyas :
-Haber todos, no agobiéis al nuevo, no quiere comer, alguien deberá comerse su comida....Todos nos reímos, y el Prefecto vino a ver que sucedía, nadie le contestó.De repente el nuevo, señaló a Nollen y en su idioma como si diciendo que éste no era digno de estar en esa mesa, pero Nollen estaba en su mundo y pasó completamente de éste, y éste se giró y se quedó así toda la comida, imaginad que sucedió después, lo cogieron y le zurraron a base de bien, a lo que ya estaba acostumbrado, pero no a éste nivel de castigo, y después le hicieron tragar la comida entre el padre Raphael y los Prefectos.Con ésto, recuerdo aquella comida por eso, por ser maravillosa, tuvimos espectáculo de primer orden y comimos a gusto si, al chico se lo llevaron después a la zona de las celdas de castigo a que se calmase un poco.
-Bien, algún problema con ellos ?
-No padre, contestó el Prefecto, se les ha castigado en proporción a su falta, unos 40 azotes por cabeza y han estado más de media hora de rodillas ante la pared con las manos tras la cabeza.
-Perfecto, indicó el padre Raphael, vayan a la fila.
El Prefecto no es que se metiera en la fila, simplemente es que no es de nuestro curso sino del último, y es veterano por lo que regresó con los suyos, a comentar la jugada y señalándonos a los tres como las víctimas de su castigo, los otros chicos, estuvieron riendo a carcajada limpia, pero poco podíamos hacer, ya éramos los tres, la conversación de ese curso de Grado 12, chicos de entre 17-18 años de edad.La fila llegó al comedor, allí con la cola fuimos sentándonos en nuestros sitios, y esperando a que llegasen la resta de maestros y llegaron, pero con una sorpresa inesperada, un chico de aspecto árabe, bien trajeado con una ropa de gentleman, estaba al lado del Director, y éste, se levantó, picó con una cucharilla una copa mientras iban sirviendo la comida.
-Caballeros, atiendan por favor, éste chico es nuevo aquí es el chico que anuncié que llegaría, él se llama Mohamed Al- Duri Hizallah, su padre es, un Príncipe árabe, aunque en efectos prácticos no gobierna más que una porción de territorio, es decir que poseen una tribu con tropa armada para defender su territorio y poseen una fortaleza en el desierto, quiero que le tratéis bien, éste es un chico que del Inglés le está costando y por ello, lo está aprendiendo, irá a la última clase de Primaria, pero hará la primera de Secundaria.Yo quedé atontado y codee a Nollen.
-Has oído eso ?, vendrá a nuestra clase
-Ya, Charles, eso no es bueno, seguro que entrará en conflicto con alguien y sino al tiempo
-No, puede ser, tío, es imposible, querrá dormir en una habitación de 400 metros cuadrados, vete a saber en la que dormía, pero cuando vea la de aquí se va a enfadar y mucho.Esa era una sorpresa inesperada, la otra es que lo sentaron en nuestra mesa, nadie habló con él para nada, la otra llegó con la comida, crema de verduras, pasable, pero de segundo, pescado, que manía con el dichoso pescado, podrían hacer algo a gusto de los chicos no ?, yo me quedé mirando al nuevo, lo tenía de frente, no quería comer, o no veía nada de lo que le ponían, y Nollen soltó una de las suyas :
-Haber todos, no agobiéis al nuevo, no quiere comer, alguien deberá comerse su comida....Todos nos reímos, y el Prefecto vino a ver que sucedía, nadie le contestó.De repente el nuevo, señaló a Nollen y en su idioma como si diciendo que éste no era digno de estar en esa mesa, pero Nollen estaba en su mundo y pasó completamente de éste, y éste se giró y se quedó así toda la comida, imaginad que sucedió después, lo cogieron y le zurraron a base de bien, a lo que ya estaba acostumbrado, pero no a éste nivel de castigo, y después le hicieron tragar la comida entre el padre Raphael y los Prefectos.Con ésto, recuerdo aquella comida por eso, por ser maravillosa, tuvimos espectáculo de primer orden y comimos a gusto si, al chico se lo llevaron después a la zona de las celdas de castigo a que se calmase un poco.