Dado que el padre Raphael nos había levantado el castigo, estar en esa posición, desnudos, con los slips en los tobillos, y de piernas abiertas con los brazos en la cabeza, y mirando la pared, ya era hora de poder descansara un poco, estábamos ambos asquedados de la posición de estar quietos a riesgo de que el padre Raphael nos viera o nos oyera para venirnos a buscar de nuevo y azotarnos de nuevo, pero por suerte no fue así, ahora nos teníamos que cambiar de ropa, ponernos el uniforme otra vez con los calzoncillos limpios y por supuesto nada de llegar con los ojos llorosos, se iba al comedor e íbamos en fila los chicos que nos habíamos quedado y el padre Raphael delante, y sin perder de vista nuestros gestos.Seguimos por el pasillo largo que hay hasta llegar al comedor, el padre Raphael picó en la puerta y la abrió, nos ordenó esperar fuera hasta que él dijese no entrásemos, eso me trajo una pregunta, si somos 4 chicos nada más de los habituales más de 800 alumnos que hay en la escuela más o menos, por que hace ahora estas cosas y no las hace cuando está, la escuela al completo ?-Por suerte estaba Nollen, la enciclopedia de la escuela, ya sabéis que lo sabía todo de ella, y me contestó, señor Lidberg, crea o no, ésta escuela se caracteriza por hacer y decir estupideces, y una de ellas es ésto, a cuantos menos alumnos son, más estupideces hacen o dicen, Christian Foull Barton y el otro chico Johnny Lee Everest no podían estar más de acuerdo, pero ese hablar entre nosotros hizo salir al padre Raphael de dentro, y nos indicó, a ver, que es lo que pasa aquí ahora ?-Nada señor, le contestamos todos, nada, estáis seguros ?-Si señor, lo estamos, bien- comentó él, ya podéis pasar, cuando entramos, vimos que la resta de mesas estaban sin poner a excepción de las de los profesores y que habían puesto 4 cubiertos más, por tanto a la falta de alumnos, íbamos a cenar con los profesores, y el padre Raphael nos indicó, no os acostumbréis, pero es mejor así que no estéis comiendo en una de esas mesas de abajo, la mesa de los profesores y dónde se sentaba el Director, estaba más alta que la resta en una especie de tarima, y por fin llegaron los profesores y el Director a la sala de comer, nos pusimos de pie para mostrar lo habitual, el respeto a la máxima autoridad del colegio, éste se acercó se sentó y nos ordenó sentarnos a los 4, lo hicimos al unisono como un Ejército, de repente el Director se dirigió a ambos, señor Lidberg y señor Nollen es así como tenéis los apellidos, si señor le respondimos, bien, siguió, tengo entendido que ya os han castigado mucho en el poco tiempo de curso, y debo decir, que estoy decepcionado con ustedes dos, en ésta escuela no se expulsa a los alumnos revoltosos o traviesos se les hace hombres seguros y derechos a base de buenos castigos que mejoran la conducta, usted señor Nollen lleva años en nuestra institución y debería saber eso, y usted señor Lidberg, que provenga de una escuela pública en la que se pasa de todo y de todos no le da derecho a hacer lo mismo aquí, aquí ambos aprenderán educación para eso pagan sus padres las cuotas, y disciplina de la fuerte si hiciera el caso, sus padres aceptan los azotes aquí como método de castigo, lo hacen firmando una declaración jurada en la pre-inscripción al centro, y desde luego, nosotros vamos a cumplir con esos objetivos, espero que mis palabras les hayan servido de algo.Una vez finalizada la charla del Director, se sirvió la cena por orden suya, de primero sopa de pollo, de segundo había filete empanado de jamón y queso, y de postre nos pusieron tarta de manzana, la mezcla explosiva que teníamos, con la carne nos pusieron unas verduras salteadas.Por cierto que, aún faltaba lo peor, el Director indicó que nos quería ver a los dos en misa, Domingo a las 9 de la mañana, uniformados y preparados para participar en ella, vaya tostón pensamos los dos ¡Tampoco es que los otros dos chicos se fueran a librar, que va, ellos estarían igualmente en esa misa, era habitual los Domingos en la capilla, la dirigía el padre Raphael, y como no, allí es cuando los alumnos aprovechamos para confesarnos de los pecados cometidos, a Nollen y a mí nos tocará seguro.La cena transcurrió sin problemas y con los temas entre los profesores del colegio, los típicos repasos que hacen en esos momentos.
Más o menos sería éste el tipo de comedor a ver en el colegio Saint Andrew, dónde pasa el relato que estoy poniendo por capítulos diarios, espero que os siga gustando las aventuras grandes de mi persona haciendo de schoolboy y su amigo Nollen........
Más o menos sería éste el tipo de comedor a ver en el colegio Saint Andrew, dónde pasa el relato que estoy poniendo por capítulos diarios, espero que os siga gustando las aventuras grandes de mi persona haciendo de schoolboy y su amigo Nollen........